Destellos de vida

Si tu obra es conocida gracias a tu apellido de casada, que para más inri es Zweig, es decir, uno de los escritores más reputados del siglo XX y el cual está viviendo en la actualidad un revival en España, vas a tener problemas.

Esto es lo que le sucede a Friderike Zweig con su Destellos de vida. Estas memorias o autobiografía o un poco de todo según como se mire tienen un gran problema y es que no resisten la inevitable comparación con El mundo de ayer de Stefan Zweig. Hay muchos textos que pueden encajarse dentro de lo que se conoce como literatura del yo que no tienen ningún interés fuera de la esfera de la privacidad en la que fueron escritos o para las personas directa o indirectamente relacionadas con ellos. Éste es el caso de Destellos de vida.
Sin embargo, el título le hace justicia ya que lo que nos encontramos, al leer sus páginas, son destellos de la vida privada de Friderike, sus años de formación, cómo conoció a Stefan Zweig, su relación, su separación, cómo vivió la Segunda Guerra Mundial en París y cómo tuvo que huir de esta ciudad con sus hijas cuando fue ocupada por el ejército alemán. Todo en una recopilación de textos que van desde la narración retrospectiva, pasando por fragmentos de diarios, textos sobre otras personalidades como Louis Pasteur o Rainer Maria Rilke, cartas… Nada que ver con el articulado ejercicio de reflexión de El mundo de ayer.

Comentarios

Entradas populares de este blog

¿Deben pagar los hijos los errores de sus padres?

Una bibliotecaria clave en el origen de Rebeldes, de Francis Ford Coppola

Escribir en la cama